J. A. R. Barcelona | viernes, 14 de octubre de 2016 h |

En los pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado o metastásico, el tratamiento es paliativo o de mejora de la calidad de vida, pero no hay opciones de curación. Por eso es fundamental desarrollar nuevas terapias en estadíos tan avanzados de esta neoplasia. Ahora, un ensayo fase 3 muestra que la supervivencia mediana de los pacientes tratados con atezolizumab (Tecentriq, de Roche) fue de 13,8 meses, 4,2 meses más que los tratados con quimioterapia basada en docetaxel (mediana de supervivencia global: 13,8 meses frente a 9,6 meses; HR = 0,73, intervalo de confianza del 95 por ciento = 0,62-0,87). En los participantes del estudio, la enfermedad había progresado después de una o más quimioterapias con derivados del platino o durante las mismas. Una buena noticia, a juicio de Manuel Cobo, médico adjunto del Servicio de Oncología del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga y uno de los autores de este trabajo, “ya que el 65 por ciento de los pacientes con cáncer de pulmón no microcítico se diagnostican en estadíos avanzados de la enfermedad y docetaxel es el tratamiento estándar”.

Atezolizumab es un anticuerpo monoclonal diseñado para actuar fijándose en la proteína PD-L1 (ligando 1 de la proteína 1 de muerte celular programada), que se expresa en las células tumorales y en los linfocitos infiltrantes de tumores. Por tanto, se trata de un agente inmunoterapéutico. Como señaló Cobo, “las terapias que inhiben los receptores de PD-L1 provocan que los linfocitos T8 reconozcan de nuevo al tumor como un ente extraño y lo ataquen”. Aunque, como apuntó este experto, atezolizumab no es el primer agente inmunoterapéutico en lograr buenos resultados en esta patología, “existe cierto fundamento científico para pensar que puede ser algo más eficaz y algo menos tóxico que otros anti PD-L1”.

Otro de los datos interesantes del trabajo es que este fármaco mejora la supervivencia respecto a la quimioterapia incluso en pacientes con un nivel de expresión de PD-L1 bajo o indetectable. En este sentido, Cobo explicó que, en el estudio, en el que han participado 1.225 pacientes, se estratificó a estos en función de su expresión de PD-L1. “Y se vio que en todos los subgrupos los pacientes se beneficiaron”. Además, los resultados de supervivencia global se refieren tanto a tumores escamosos como no escamosos.