Almudena Fernández Madrid | viernes, 13 de noviembre de 2015 h |

Establecer sistemas de liderazgo compartido entre medicina de familia e interna a través de una alianza entre ambas especialidades es una prioridad porque permitiría dar respuesta a las nuevas necesidades del sistema sanitario y de los pacientes, tal y como aseguró a GM Antonio Fernández Moyano, jefe de Servicio de Medicina Interna del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe en el marco del 36º Congreso de la Sociedad Española de Medicina Interna.

A su juicio, la relevancia de que médicos de primaria e internistas trabajen conjuntamente proviene, en primer lugar, de que existe un cambio demográfico y patológico en la población por el envejecimiento y el incremento de la cronicidad. No hay balance entre las necesidades sanitarias de la y la inversión que se realiza en esta materia, además, se incrementan los requerimientos, en parte por el aumento de la tecnología sanitaria. Asimismo, han crecido las expectativas de la población, que “pide más del sistema”.

Además, en los últimos años se ha producido una reducción en la inversión sanitaria, pasando del siete por ciento del PIB dedicado a Sanidad en 2007 al 5,9 por ciento previsto para 2016.

Esta relación estrecha entre profesionales también beneficia los valores asistenciales que pide la población a los médicos: que sean eficaces, tengan seguridad clínica, mantengan la accesibilidad al sistema sanitario, actúen conforme a protocolos y a medicina basada en la evidencia, respeten su autonomía en la toma de decisiones y favorezcan la referencia clínica. Y es que los pacientes quieren saber cuáles son sus médicos y enfermeros de cabecera en primaria y en el hospital. Además, no entienden que no exista coordinación y que, una vez dados de alta, algunos de sus médicos no conozcan su historia clínica ni la situación en que están sus patologías.

Para conseguirlo, Fernández Moyano señaló que las nuevas tecnologías son una herramienta básica que beneficia que los sistemas de trabajo entre ambos niveles sean eficaces. La historia clínica digital común es una herramienta básica, “el médico de familia debe de saber qué está pasando con el paciente en el hospital y el internista lo que pasa en atención primaria”, subrayó.

Además de las reuniones presenciales en el centro de salud, abogó por implementar sistemas que permitan la comunicación sin necesidad de que sea presencial: teleconsulta, interconsulta no presenciales, teleconferencias, videoconferencias, etc., que están ya disponibles a nivel usuario pero debieran ser incorporadas en los modelos de relación familia e interna.