A los lectores informaros que más que una entrevista, el doctor Román nos ha deleitado con una clase de arte. Y qué mejor que su consulta para diagnosticar las más de 600 diapositivas que tiene de obras con patologías mamarías. Sí, sí… a través de la historia hace su particular evolución de la anatomía… Y es que José Manuel no solo sabe de medicina…
Pregunta. Antes de empezar con el diagnóstico, ¿cómo surge tu pasión por lo artístico?
Responder. Siempre he sido un enamorado de la pintura y el arte. Desde que estudiaba bachillerato me apasionaba. Tengo claro que “el que sólo sabe de medicina, ni de medicina sabe”, como decía José de Letamendi, y esto fue lo que me ayudó a fusionar la historia del arte con la medicina.
P. Has estudiado toda la evolución en el arte de la patología mamaría, y ha descubierto muchas cosas, ¿qué destaca de sus hallazgos?
R. Descubrí cómo algunos autores como Rembrandt, Rubens o Rafael plasmaron la enfermedad en sus obras sin saber en realidad qué era. Lo hacían de una manera tan real… Y es que a través de la historia, llama la atención la cantidad de iconografía que existe. Ten en cuenta que el primer cáncer de mama que se describió fue en el año 3.000 a.c. en el papiro de Edwin Smith y reflejan auténticos tumores. Lo más curioso es que los artistas ni sabían lo que retrataban y eran capaces de verlo y de describirlo tal cual…
P. ¿Cuáles han sido las enfermas más artísticamente retratadas?
R. La Fornarina, de Rafael, las Tres Gracias de Rubens… En la obra de Rembrandt muchas de sus principales protagonistas padecen cáncer, sin él saberlo…
P. Estudiando alguna obra, ¿has descubierto alguna anécdota?
R. Me gusta mucho contar la historia de Betsabé. Betsabé estaba casada con Urías, pero en realidad se había enamorado de David. Éste mandó a su esposo al frente hasta que murió. Todos los artistas retrataron esta historia con una persona mirando desde alguna parte, un mirón… En las pinturas, los artistas reflejan algunos síntomas del cáncer de mama como las tumoraciones en la axila o una invaginación en la piel…
P. Y en la consulta, ¿le cuentas historias a los pacientes?
R. Si surge sí, pero hay que tener tiempo, algo que no es habitual.
P. ¿Te ha servido el arte para tu trabajo diario?
R. Muchísimo. Me hace estudiar la mama desde otro punto de vista, completamente diferente.
P. Probablemente, lo tendrías más difícil para diagnosticar en la actualidad, por aquello de que ahora se lleva “lo artificial”, ¿te animas con el arte contemporáneo?
R. No sé. Yo creo que lo que he visto en la época contemporánea ha sido más defectos de fotografía que de la mujer.
P. ¿Qué estás investigando actualmente?
R. Estoy empezando a trabajar en el surrealismo. Todavía estoy encontrándo una conexión entre Magrid y Dalí.
P. ¿Y en la vida real, tienes alguna ‘Madonna’ conocida?
R. (Risas)… mejor hablamos de arte…
P. Uno de tus cuadros favoritos son las tres gracias de Rubens. ¿Cuáles son las tres gracias del SNS?
R. La primera que la sanidad llegue a todo el mundo; la segunda, que no tiene límites y la tercera, te diré una desgracia y es que no pagan lo suficiente a todos los médicos.
P. Si tienes que elegir un cuadro que refleje la situación actual de la especialidad, ¿con cuál te quedarías?
R. Con algún cuadro que refleje el tratamiento de la patología de la mama. Actualmente, es lo que estamos haciendo.
P. ¿Necesitan mamar conocimiento los representantes sanitarios?
R. Sí, muchísimo y dejarse aconsejar por la gente que sabe, que no lo hacen normalmente. Una de las cosas más importantes es la creación de unidades multidisciplinarese donde exista el intercambio de ideas, en patología mamaría hacen falta equipos así.
P. ¿Este collage se está consiguiendo?
R. Nos hemos atascado últimamente, aunque íbamos embalados.
P. Las grandes obras tardan años en terminarse, ¿la medicina es igual de laboriosa?
R. Sí que es trabajosa. Estamos hablando de una experiencia de muchos años que no se consigue fácilmente. Si he tenido algún éxito profesional ha sido gracias a esto.
¿Un artista? Rubens.
¿Qué protagonista artística te hubiese gustado diagnosticar? Cuando un cáncer es pintable es porque está avanzando, así que me hubiese gustado detectarlo precozmente y evitar pintarlo.
¿Si el pincel es al artista…? Me quedaría con la mamografía para haber detectado la enfermedad a esas protagonistas.
¿Cuántas veces diagnosticas en los museos? Muchísimas veces.
