E.M.C. Madrid | viernes, 01 de junio de 2018 h |

Ante el objetivo de oliminar la hepatitis C en nuestro país en 2021, lo médicos de familia se han preguntado si es suficiente con disponer de fármacos efectivos. En esta mesa del congreso, Ignacio Aguilar Martín, médico de familia del centro de Salud El Ejido Norte, en Almería, ha trazado la hoja de ruta para alcanzarlo en el contexto de su área de actuación.

En declaraciones a GM, Aguilar destaca que los médicos de atención primaria juegan un papel fundamental en la eliminación de la hepatitis C. “Quedan aproximadamente 65.000 pacientes sin diagnosticar y los médicos de familia tenemos una posición privilegiada para conseguir diagnosticar y derivar al nivel hospitalario a estos pacientes”, advierte. En este sentido, remarca que su función es múltiple. En primar lugar, considera necesario realizar educación sanitaria para evitar contagios. En segundo, incidir sobre población de riesgo y población entre 20 y 79 años para diagnosticar a los pacientes sin evaluación hospitalaria. En tercer lugar, propone realizar un acompañamiento al paciente durante su tratamiento en contacto permanente con los especialistas hospitalarios y, en cuarto lugar, orientar el esfuerzo a evitar nuevas reinfecciones.

Formación continuada

El profesional destaca algunas dificultades que se plantean en la consulta en pacientes que han logrado superar la infección. “En determinados grupos de pacientes con practicas de riesgo como usuarios de drogas o relaciones sexuales de riesgo la dificultad la encontramos en conseguir que no se reinfecten. Para esto debemos prestar especial atención a la educación sanitaria y a la captación en consulta”, advierte.

Con respecto a la formación de los médicos del primer nivel en este campo, Aguilar señala que dentro de las obligaciones de estos profesionales se intenta estar actualizados y formarse en todas la novedades que aparecen en todos los campos de la clínica diaria. “Encuentros como el congreso son fundamentales en esta formación”, subraya.

Pero no basta con ello, Ignacio Aguilar considera que la labor educativa que ha de realizar el colectivo es también de primer orden. En este sentido, destaca que es importante que la población conozca las vías de transmisión de esta enfermedad y que reciban una educación sanitaria adecuada.

También es fundamental, en su opinión, facilitar a los profesionales un diagnostico eficaz y rápido. En este sentido, considera importante la creación de circuitos entre el nivel de atención primaria y atención especializada sin demoras. Para finalizar, también destaca como fundamental que todos los pacientes que precisen del tratamiento farmacológico, tengan acceso a él, ya que las tasas de curación son superiores al 95 por ciento.