C.M.López, RSC | miércoles, 14 de septiembre de 2016 h |

El desempleo juvenil es una de las mayores preocupaciones de cualquier país europeo que está frenando el crecimiento económico a todos los niveles. Ante esto, la Comisión Europea ha elaborado una nueva agenda de habilidades con el objetivo de garantizar que las personas desarrollen sus capacidades y así aprovechar el capital humano para aumentar la empleabilidad, la competitividad y el crecimiento del continente europeo.

Para la Comisión, es una de las mejores opciones para ayudar a los jóvenes a encontrar trabajo, ser activos y ganar confianza. Las cifras lo dicen todo. En 2025, el 50 por ciento de las empresas necesitarán personas con un alto nivel de cualificación y sólo en un 10 por ciento demandarán habilidades elementales.

Los datos, por su parte, no son esperanzadores, según diferentes estudios, 70 millones de europeos no tienen capacidad para leer o escribir y carecen de habilidad en matemáticas y en materia digital. Lo que supone un riesgo de desempleo, pobreza, e ,incluso, exclusión social. Aunque la tasa de abandono escolar ha descendido al 11 por ciento, 87 millones personas en edad de trabajar no han finalizado la educación superior en la Unión Europea. El dato positivo es que el porcentaje de personas que finaliza educación terciaria sigue mejorando y alcanza el 38 por ciento.

Sin embargo, mientras que un gran número de europeos, especialmente jóvenes cualificados, trabajan en empleos que no corresponden a su nivel formativo, muy pocas personas tienen la mentalidad emprendedora y las competencias necesarias para iniciar su propio negocio y seguir adaptándose a los nuevos requisitos del mercado laboral. Además, según el informe, el 40 por ciento de los empresarios europeos que no encuentran personas con las habilidades adecuadas para crecer e innovar.

Ante esta situación, la nueva Agenda elaborada por la Comisión propone a los Estados miembros una serie de acciones para mejorar la calidad de conocimientos de sus habitantes y su relevancia para el mercado de trabajo como aumentar los niveles de conocimientos, promover habilidades transversales y encontrar maneras de anticiparse a las necesidades del mercado de trabajo.

De este modo, la Comisión Europea trabajará para paliar la tasa de analfabetización y la revisión del marco europeo de cualificaciones. El objetivo es hacer un mejor uso de todas las habilidades disponibles en el mercado laboral europeo.

Además, la CE quiere crear un marco común en materia de educación e industria para el desarrollo del talento digital y asegurar que las personas tienen adecuadas competencias digitales. Del mismo modo, se elaborará un plan para la cooperación sectorial en aptitudes para abordar el déficit existente en sectores económicos específicos.

En cuanto a las acciones más inmediatas, en los próximos meses el objetivo que Europa se ha marcado pasa por aunar estrategias en materia de empleo con facilidades para los más jóvenes, revisando el marco Europass, ofreciendo mejores herramientas formativas. Además, la apuesta por la formación profesional será clara. La innovación también jugará un papel fundamental y la fuga de cerebros, consecuencia de la crisis económica.

Asimismo, el compromiso europeo se centrará también en realizar un seguimiento a los graduados para poder analizar su progreso en el mercado laboral. De esta manera, Europa busca mejorar sus estrategias para impedir que este éxodo siga creciendo.