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Aclidinio, un antagonista de larga duración de los receptores muscarínicos (LAMA) indicado para el tratamiento de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) se ha convertido en el primer protagonista de de una serie de nuevas publicaciones editadas por la Fundación Cotec con el objetivo de “demostrar la excelencia de la tecnología española”, tal y como ha subrayado Juan Mulet, director de esta fundación, durante la presentación del primer número de la colección.
Pero ¿por qué la elección de aclidinio como innovación terapéutica española en la I+D farmacéutica? En opinión de Pere Berga, asesor científico de Almirall, la compañía farmacéutica de capital español que está detrás del desarrollo de esta molécula, aclidinio “vino a satisfacer una necesidad no cubierta en EPOC”. Y es que, si bien ya exisitían tratamientos para el manejo de esta patología, éstos actuaban sobre los receptores muscarínicos M1, M2 y M3 de la musculatura lisa bronquial, lo que podía provocar efectos secundarios a nivel cardiaco, ya que precisamente los receptores de M2 se encargan de mediar la inhibición del corazón por el nervio vago.
Sin embargo, aclidinio, más selectivo porque actúa preferentemente sobre los receptores M3, minimiza el potencial efecto taquicardizante de estos agentes. Además, su metabolización más rápida permite que “no sea necesario ajustar las dosis en personas mayores, ya que no existen interacciones con otros medicamentos”, apunta Berga. Además de la molécula, la compañía también ha comercializado un nuevo tipo de dispositivo inhalador de polvo seco, multidosis, de fácil uso, y que dispone de un sisitema de de información que indica al paciente si la toma ha sido correcta.
Una innovación terapéutica importante que les ha colocado como parte de esta nueva colección de publicaciones titulada “Excelencia de la tecnología española”. Pero esta no es la única razón por la que Almirall inicia esta serie de documentos. Su dedicación a la actividad investigadora, en la que invierten el 23 por ciento de sus ventas y de la que se ocupa más de 20 por ciento de la plantilla, también ha tenido mucho que ver. “Almirall investiga en campos arriesgados y además tiene éxito”, ha destacado Mulet.
Además, aprobada la molécula tanto por la Agencia Española del Medicamento (EMA) como por su homóloga americana (FDA), Cotec también ha valorado la proyección internacional de la innovación terapéutica de esta farmacéutica de capital íntegramente español. Y continúan su labor investigadora, ya que actualmente se encuentran haciendo ensayos clínicos para una nueva indicación en dolor oncológico de su fármaco para la espasticidad en esclerosis múltiple, al tiempo que ensayan nuevas combinaciones de aclidinio con formoterol en EPOC.
Los siguientes números de esta colección estarán más dedicados a sectores como la energía y el medio ambiente o las TIC, siempre que se pruebe la utilidad de la colección. “Estamos en fase IV todavía”, concluyó Mulet.
