De la resistencia a los antibióticos o resistencia antimicrobiana se dice que será la próxima pandemia. Y es que supone una carga considerable para los sistemas sanitarios y la sociedad en su conjunto. De hecho, según el informe de Investigación Global sobre la Resistencia a los Antimicrobianos (GRAM), se estima que en 2019 hubo aproximadamente 4,95 millones de fallecimientos asociados y causó directamente alrededor de 1,27 millones de muertes.

En 2020, fue declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una de las 10 principales amenazas de salud pública y, en 2022, la Unión Europea también la catalogó como una amenaza prioritaria. Por tanto, se trata de una amenaza creciente –y cada vez más preocupante– que requiere de una acción coordinada urgente para un cambio de tendencia.

Abordar necesidades no cubiertas

Para abordar este desafío, Fundamed celebrará el próximo 30 de enero la jornada ‘La lucha contra la resistencia antibiótica. El papel de la innovación‘, con la colaboración de Shionogi, cuyo objetivo es concienciar sobre las necesidades no cubiertas en este ámbito e identificar qué acciones normativas poner en práctica en los Estados miembro de la Unión Europea y, en concreto, en España.

Así, Fundamed y Shionogi reunirán a actores clave del ámbito sanitario, incluidos los responsables políticos, los grupos de defensa de los pacientes, el mundo académico y la industria, para debatir cómo aumentar colectivamente los esfuerzos en la lucha contra las resistencias antimicrobianas.

La presentación del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), la próxima revisión de la legislación farmacéutica de la UE y la futura Presidencia Española del Consejo de la UE crean nuevas oportunidades para establecer sinergias transfronterizas que impulsen la innovación en el desarrollo de antibióticos eficaces.

Precisamente, el encuentro contará con la participación de los eurodiputados Dolors Montserrat (PPE) y Nicolás González (S&D), que aportarán la visión europea de la resistencia a los antibióticos, en el marco de la Estrategia Farmacéutica Europea.

Además, tendrá lugar una mesa redonda en la que los expertos identificarán soluciones viables para abordar las necesidades no cubiertas y valorar su aplicación a nivel nacional. Asimismo, los ponentes compartirán su perspectiva sobre las nuevas formas de gobernanza y la colaboración de las múltiples instituciones para garantizar que la acción sea holística y con recursos suficientes para lograr un impacto adecuado.

La experiencia española

Para hacer frente a la resistencia a los antibióticos, nuestro país cuenta con el PRAN. Un plan “muy completo”, según apunta Nicolás González en declaraciones a EG, que se basa en seis líneas de acción principales: vigilancia del consumo y de la resistencia a los antibióticos, control de las resistencias, medidas de prevención y tratamiento, investigación, formación de los profesionales sanitarios y comunicación efectiva y específica para la población.

Según asevera González, los datos demuestran que el plan está funcionando desde que entró en vigor en el año 2014. “El 12º Informe ESVAC, correspondiente al consumo de antibióticos veterinarios en 31 Estados miembro, muestra que España ha disminuido en un 62,5 por ciento el consumo de antibióticos veterinarios desde el inicio del PRAN, siendo el país con la evolución más favorable”, ha destacado el eurodiputado de S&D.

Por su parte, Dolors Montserrat indica que se trata de un “gran plan diseñado de la mano de expertos y profesionales“. “Es un momento histórico y tenemos que aprovecharlo para abordar este gran reto de salud pública. Debe ser una prioridad en la construcción de la UE para la Salud y también a la hora de invertir los fondos de recuperación, que han de servir para modernizar y fortalecer los sistemas sanitarios y la respuesta a amenazas a la salud”, ha concluido Montserrat.


También te puede interesar…