| martes, 04 de julio de 2017 h |

Tanto en el alzhéimer como en el párkinson, una proteína forma grupos tóxicos en las células cerebrales. En el alzhéimer el detonante dentro de las células se llama TAU, que forma enredos neurofibrilares, mientras que en el párkinson, la proteína es alfa-sinucleína, que crea cuerpos de Lewy.

Científicos de la Universidad de Emory, en Estados Unidos, habían identificado previamente una enzima (asparagina endopeptidasa o AEP) que recorta TAU de una manera que la hace mástóxica, de forma que los fármacos que inhiben la AEP tienen efectos beneficiosos en los modelos animales de Alzheimer. En un nuevo artículo publicado en Nature Structural and Molecular Biology, científicos de Emory muestran que la AEP actúa de la misma manera hacia la alfa-sinucleína.