GM Madrid | miércoles, 31 de octubre de 2018 h |

La radioterapia reduce el riesgo de recaída en pacientes con cáncer de mama de bajo riesgo, es decir, aquellas cuyo tumor se ha encontrado solo en una mamografía o incidentalmente durante una biopsia de mama que se ha realizado por otra razón. Así lo indican los resultados obtenidos en un ensayo clínico liderado por el jefe del servicio de Radioterapia de Haz Externo en el Centro de Cáncer Memorial Sloan Kettering (Estados Unidos), Beryl McCormick, y que ha sido presentado en la en la 60ª Reunión Anual de la Sociedad Americana de Oncología de Radiación (ASTRO, por sus siglas en inglés).

En el trabajo, las pacientes que se sometieron a radioterapia de mama completa (WBRT) y las que también optaron por tomar tamoxifeno, experimentaron las tasas de recurrencia más bajas, pero incluso aquellas que no recibieron ningún tratamiento adicional después de la cirugía no experimentaron consecuencia mortal.

“Lo más sorprendente fue que la tasa de recaída en las pacientes asignados al azar para recibir radioterapia fuese tan baja. La radiación redujo la recurrencia en más del 70 por ciento, y este fue un impacto mucho más importante del que esperábamos”, han comentado los investigadores, si bien han reconocido que de por sí estas pacientes tienen una tasa de recaída “extremadamente baja”.

En total, se estudiaron a 629 pacientes cuya edad media era de 58 años, incluidas un 76 por ciento de mujeres posmenopáusicas. El tamaño medio del tumor patológico fue de 0,60 centímetros, y el grado de tumor nuclear más alto fue 1, encontrado en el 44 por ciento de los pacientes, y los tumores de grado 2 se diagnosticaron en el 56 por ciento restante. El tamoxifeno fue usado por el 58 por ciento de los pacientes en el brazo WBRT y el 65 por ciento de los del brazo de observación.

El tiempo medio de seguimiento fue de 12,4 años y, después de 12 años, la incidencia acumulada de recidiva local fue del 2,8 por ciento (IC del 95% 1.1, 5.6) para aquellos en el brazo WBRT y del 11,4 por ciento (7.7, 15.8) para los del brazo de observación. La incidencia acumulada de 12 años de recurrencia local invasiva fue del 1,5 por ciento para aquellos en el grupo de WBRT y del 5,8 por ciento para los que no recibieron radiación.

“Durante los cinco años adicionales posteriores a la cirugía, hubo un ligero aumento de la tasa de recurrencia local. Para aquellos que recibieron WBRT, la tasa aumentó en poco menos del uno por ciento, lo que lleva a casi el 3 por ciento después de la cirugía. Para aquellos que no recibieron radiación, la tasa de recurrencia aumentó en un punto porcentual cada año adicional de seguimiento, pasando de poco menos del 7 por ciento a poco menos del 12 por ciento después de 12 años. Estos resultados deberían servir para un debate significativo entre el paciente y el médico que incluya riesgos, beneficios y el propio grado de comodidad del paciente”, han zanjado los expertos.