E.M.C. Madrid | viernes, 20 de marzo de 2015 h |

El plan estratégico para el abordaje de la hepatitis C en el Sistema Nacional de Salud lo ha dejado “suficientemente claro”. Los nuevos antivirales directos activos sobre el virus de la hepatitis C (VHC) “están adscritos al marco de atención especializada, y no al de atención primaria. También se podría haber decidido que con el fin de aumentar el diagnóstico de los pacientes se trasladaba a la atención primaria y no ha sido así”. Con estas palabras, el presidente de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), José Luis Poveda, aporta la visión de estos profesionales sobre la petición del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cgcof), que en su última publicación “Punto farmacológico: Terapéutica farmacológica de la hepatitis C” defiende la dispensación de estos fármacos en la oficina de farmacia.

Según recalca el boletín, el uso por parte de los pacientes de estos fármacos es, en su inmensa mayoría, extrahospitalario. El documento del Cgcof cita textualmente que ninguno de estos medicamentos requieren medidas especiales de control, como la monitorización continua durante la administración o tras ella, única justificación clínica que soportaría la exclusividad de uso intrahospitalario de un medicamento, más allá de los formatos diseñados para un manejo más conveniente en la farmacia hospitalaria (FH).

En la misma línea, insisten en que la localización de la oficina de farmacia, más próxima al paciente, y el conocimiento personal por parte de los farmacéuticos comunitarios, pueden facilitar un seguimiento más estrecho del plan de gestión y minimización de riesgos de los medicamentos. Y lo que es más, siempre y cuando no se trate de una situación urgente, continúan, para el paciente es más fácil y cómodo acudir a la oficina de farmacia, por proximidad y horarios, que a la consulta del especialista, sujeta a una planificación necesaria. Además, la farmacovigilancia y el seguimiento farmacoterapéutico desde la farmacia no es una alternativa al seguimiento clínico del médico, sino un complemento que permite optimizar la gestión del control farmacoterapéutico, recuerdan.

Para Poveda, no existe ninguna duda sobre la capacitación del farmacéutico de farmacia sobre la dispensación de cualquier tipo de tratamiento, pero subraya que hay que ser conscientes de que el Sistema Nacional de Salud establece determinadas condiciones para ciertos medicamentos que considera que requieren un mayor control, seguimiento y resultados.

En ese sentido, el presidente de la SEFH destaca que en el ámbito de la atención especializada, la coordinación con los profesionales, el acceso a la historia clínica o la valoración de la respuesta viral sostenida solo se puede hacer en un contexto de acceso a la información como el de la farmacia de hospital.

Por otra parte, Poveda recuerda que la dispensación hospitalaria de fármacos para la hepatitis C “no es de ahora, viene ya de diez años “. De ahí que estos profesionales conozcan los problemas habituales y las interacciones más frecuentes tanto en pacientes monoinfectados como en coinfectados”.

El presidente de la SEFH destaca que sería contradictorio que el plan estableciera requisitos estrictos para diagnosticar y tratar a los pacientes y abriera la mano con la dispensación. Según este especialista, el control de resultados que se propone el ministerio exige en la práctica resultados de respuesta viral y necesita concentrar en pocas unidades y disponer de servicios especializados como la farmacia hospitalaria. El debate no es la capacitación —prosigue — sino dónde se sitúa en un sistema que ha establecido que esta enfermedad tiene que ser diagnosticada en un área que cumpla con determinadas características y reúna un cierto expertise.

En este sentido, incide en que no es una enfermedad crónica, “el tratamiento dura doce semanas y debe tener un seguimiento intensivo pero un porcentaje altísimo dejará de tener infección”.

Respecto a la posibilidad de que en la práctica se pueda cumplir el plazo de tres semanas entre prescripción y dispensación marcado por el plan, Poveda reconoce que las comunidades se replantean cambios en los procesos centralizados para agilizarlo. Si es así, “los servicios de farmacia también podrán facilitar los tratamientos en un entorno en el que los pacientes podrán acceder rápidamente”, finaliza.

El consejo insiste en que para el paciente resulta más fácil y cómodo acudir a la oficina de farmacia que al especialista

Poveda admite que las CC.AA. plantean cambios en los procesos centralizados. En ese caso, el acceso será rápido