| miércoles, 04 de noviembre de 2015 h |

El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández, ha cifrado este miércoles en “entre cuatro y cinco años” la puesta en marcha del nuevo hospital de Toledo, cuyas obras comenzarán en el mes de enero de 2016.

A preguntas de los medios tras dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno, el titular de Sanidad ha explicado que una cosa es la duración de la obra, cuyo término no supone “la apertura del hospital”, y otra las licitaciones, equipamientos y permisos, sobre todos de aparatos de radiaciones, que son “largas”.

“Me atrevo a dar la –fecha– de comienzo de enero, pero no la final”, ha subrayado Fernández, que ha incidido en que, con toda la equipación, el hospital no estará abierto en menos de cuatro o cinco años”.

Además, ha explicado que entre finales del mes de diciembre y el mes de enero estará terminada “la parte funcional”, al margen de la cual habrá que acometer “algún arreglo” en la parte estructural y de edificación.

Respecto a la externalización de servicios, ha insistido en que continuarán así los que ya están externalizados actualmente en el hospital Virgen de la Salud –lavandería, limpieza, cafetería y seguridad–, ya que, en la sanidad pública, “son más eficientes y menos caros que los no externalizados”.

Finalmente, preguntado por el plan de tráfico, ha comentado que no es la Consejería de Sanidad la que va a tramitar esa situación sino el Ayuntamiento y el Gobierno central.