josé a. rodríguez Barcelona | viernes, 20 de febrero de 2015 h |

Esta técnica permite detectar un alelo mutado de 10.000
no mutados, una sensibilidad imposible hasta ahora

Gracias a este método,
se podrá seguir en tiempo real la evolución de la enfermedad y la respuesta al tratamiento

El cáncer colorrectal representa el 15 por ciento de los tumores que se diagnostican en España. Es, por tanto, el tipo de tumor más frecuente sin tener en cuenta el sexo (el segundo más frecuente en mujeres, y el tercero en hombres). Como señaló Josep Tabernero, el 55 por ciento de los pacientes que padecen este tipo de cáncer presentan mutaciones de RAS y no van a responder a las terapias dirigidas a EGFR. Asimismo, el cáncer colorrectal causa la muerte de unas 649.000 personas cada año en todo el mundo, lo que representa el 8,5 por ciento de los fallecimientos producidos por tumores. A pesar de que está aumentando la incidencia del cáncer, Tabernero explicó que se está reduciendo la mortalidad gracias a que se está avanzando en “la prevención, se conoce mejor la enfermedad y cada vez se aplican más y mejores tratamientos personalizados”. Aun así, destacó que cada año se diagnostican más de 200.000 casos de cáncer en España, patología que ya es la primera causa de muerte en las personas entre 40 y 79 años.

Nuevo paso para avanzar en el tratamiento personalizado del cáncer. El Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) ha empezado a utilizar una técnica de biopsia líquida que permite la determinación de biomarcadores RAS (KRAS y NRAS) en pacientes con cáncer colorrectal metastásico. El VHIO empleará los tests OncoBEAM gracias a un acuerdo de colaboración con Sysmex Inostics y Merck Serono, compañías que han desarrollado esta tecnología. Por tanto, este instituto se convierte en el primer centro académico que podrá aplicar este tipo de biopsia líquida (también conocida como test de biomarcadores basado en sangre), que hasta ahora sólo se empleaba en los centros asociados a Sysmex Inostics.

Como explicó Josep Tabernero, director del VHIO, durante la rueda de prensa de presentación de la técnica, “ésta permite analizar las alteraciones genéticas de los tumores en la sangre, ya que identifica qué fragmentos del ADN están mutados y cuáles no”. Para ello, una vez que se obtiene la muestra de plasma, “se amplifica, se emulsiona y se aplica un proceso de hibridación”. Posteriormente, “se fabrican varias secuencias repetidas del ADN que se quiere buscar y las partículas se rompen”. Por último, “estas partículas se captan mediante magnetismo y se miden utilizando una citometría de flujo”. De este modo, comenta Tabernero, se puede detectar “qué alelos están mutados y cuáles no”. Por tanto, gracias a este análisis de sangre es posible realizar una clasificación molecular del tumor.

Rápido, no invasivo y más sensible

Una de las principales ventajas de este sistema es que evita que haya que extraer tejido al paciente. Además, señala Tabernero, “los resultados se pueden tener en un par de días laborables. En cambio, para las biopsias de tejidos se necesitan entre siete y ocho días”.

Este experto pone el énfasis en la elevada sensibilidad de esta biopsia líquida.”Es posible detectar un alelo mutado de 10.000 no mutados, algo que no se podía hacer hasta ahora”, asegura. Se trata, por tanto, de un método muy fiable, no invasivo, rápido y que se puede emplear en muchas más ocasiones que las biopsias tradicionales. Como explica Tabernero, la circulación sanguínea es una especie de “basurero de todo el organismo, por el que circulan restos del ADN de las células tumorales y de las células sanas”. Las biopsias de tejidos permiten captar una “fotografía del tumor”. Pero, mediante esta novedosa técnica, se podrá obtener una “fotografía de 360 grados, ya que lo que se ve en la sangre es representativo de todos los fragmentos de tumor que hay en el organismo”. E, incluso, se puede obtener “un vídeo, ya que es posible realizar numerosos análisis de sangre para observar, en tiempo real, la evolución de la enfermedad en un paciente determinado y su respuesta al tratamiento”.

A juicio de Tabernero, las biopsias líquidas no sustituirán a las biopsias de tejidos, sino que “serán un complemento que se emplearán cada vez con más frecuencia”. Como anunció este experto, en el VHIO realizarán este nuevo test a todos los pacientes. Y a pesar de que, por el momento, sólo se utilizará en cáncer colorrectal metastásico, “se está investigando para que se puede aplicar también en cáncer de mama o de pulmón, por ejemplo”.

VHIO, primera opción

Como señala Belén Garijo, miembro del Comité Ejecutivo de Merck y CEO de Merck Healthcare, cuando tuvieron que decidir qué centro debía ser el primero en implantar este técnica, “teníamos claro que debía ser el Vall d’Hebron, ya que es un excelente hospital con un elevado nivel científico”. Asimismo, Garijo destacó la importante apuesta que está realizando su compañía en el campo de la medicina personalizada en el tratamiento del cáncer. “Más del 70 por ciento de las moléculas en desarrollo en oncología e inmunoterapia están asociadas a un biomarcador”, aseguró.

Introducir la innovación

Por su parte, el conseller de Salud catalán, Boi Ruiz, se mostró orgulloso de que el VHIO sea pionero en realizar estas biopsias líquidas, “que permiten avanzar en el campo de la medicina personalizada”. Además, hizo hincapié en que esta colaboración entre el VHIO, Merck y Sysmex Inostics es un “buen ejemplo de cómo introducir la innovación mediante alianzas estratégicas entre el sector público y el privado con el objetivo de mejorar el tratamiento y la calidad de vida de los pacientes”.

Se espera que el test de biomarcadores RAS mediante biopsia líquida reciba la aprobación de Conformidad Europea (marcado CE) en los próximos meses, haciéndolo así accesible a una población más amplia de pacientes con cáncer colorrectal metastásico. El objetivo es que, a lo largo de 2015, se implante en otros centros de España y en países como Australia, Francia, Alemania, Italia y Reino Unido, entre otros.