c. s. Valencia | viernes, 13 de noviembre de 2015 h |

Se sabe que desde la década de los noventa hasta ahora, el arsenal terapéutico para tratar la esclerosis múltiple (EM) ha crecido exponencialmente, pasando de una única opción terapéutica, la misma para todos los pacientes; a una medicina casi personalizada. Se sabe, que la falta de adherencia de estos pacientes se sitúa en torno al 30 por ciento y que si no hay cumplimiento terapéutico, el número de brotes es mayor, la discapacidad aumenta y esto extrapolado al ámbito económico se traduce en un incremento de los costes y la pérdida de la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS). También se sabe que cada vez más, los profesionales analizan los criterios de seguridad y eficacia de las diferentes alternativas disponibles antes de prescribir un determinado fármaco u otro. No obstante, ¿qué se sabe de la importancia de los NNT —número necesario de pacientes a tratar para tener un resultado de salud positivo— para la evaluación económica de los nuevos medicamentos?

Con el objetivo de responder a esta pregunta y de hacer un análisis sobre la eficiencia de los nuevos fármacos disponibles en esta patología basado en NNT, se celebró un taller en el marco del 60º Congreso de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), que contó con la presencia de expertos como Fernando Gómez Pajares, especialista en medicina Preventiva y Salud Pública, en el Hospital Arnau de Vilanova (Valencia), quien destacó la importancia de esta herramienta, ya que “da una perspectiva interesante en el sentido en que habla del impacto que tiene una intervención, permite compararla con otras intervenciones y además se centra en valores absolutos (la carga de enfermedad que puede ahorrarse, el número de casos nuevos que se pueden evitar o los éxitos que se obtienen), en función de si se apuesta por un tratamiento u otro”.

Asimismo, Ana Ortega, especialista en Farmacia Hospitalaria de la Clínica Universidad de Navarra (CUN), suscribió las palabras de Gómez, añadiendo que cuando se van a evaluar nuevos fármacos, “lo importante es el cálculo de coste-utilidad, pero si no se tienen datos de años de vida por calidad de vida, lo que se hace es calcular el coste-efectividad”. En este caso, continuó la experta, se puede llegar a calcular la diferencia de eficacia entre diferentes tratamientos. “Se trata de la diferencia absoluta, calculada por NNT”.

Amando Mengual, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital de Manises (Valencia) y que ejerció de moderador durante el taller, aportó su granito de arena afirmando que los NNT poseen “una gran potencia comunicadora”, porque incluyen tanto información clínica, como estadística.

“Es muy importante tener claro que hay que evaluar siempre la eficiencia de los nuevos medicamentos y si puede ser siempre a través de estudios coste-utilidad mejor; pero si estos no son posibles, hay que recurrir a los estudios de coste-efectividad, en donde se tengan siempre en cuenta las diferencias absolutas.

En relación con este asunto, Gómez dejó claro que para estudiar determinados problemas, se deben aplicar métodos cuantitativos y para ello, se cuenta con diferentes medidas: de frecuencia (por ejemplo, cuánta enfermedad hay en una población), de asociación (cómo se relaciona la exposición a un riesgo con una enfermedad) y las de impacto (cuanta enfermedad ahorraría si consiguiesen eliminar dichos riesgos). En estas últimas, se engloban los NNT, aunque estos no se pueden calcular sin las primeras.

Ventajas

Si bien es cierto que esta herramienta fue valorada bastante positivamente por los asistentes, estos reconocieron que también tiene sus limitaciones, pero pese a ellas, “las ventajas son claramente superiores”. Aparte, es el instrumento que se debe utilizar “en los estudios de evaluación de eficiencia, cuando hablamos de efectividad”, agregó.

Los NNT tienen dos ventajas claras: por un lado, ofrecen una idea del efecto absoluto que tiene una intervención en comparación con otra y, por otro, es que son “fácilmente entendibles”, de acuerdo con Gómez. Es decir, de un modo sencillo, esto se podría traducir por cuántos casos tienen que ver y tratar los especialistas para obtener un éxito nuevo que no se conseguía con la otra alternativa.

A su vez, en hándicap de los NNT no es otro más que al final, el resultado “es solamente una imagen, una imagen absoluta; y si se quiere saber, por ejemplo, si el parámetro ‘X’ está relacionado con el ‘Y’ “es necesaria una imagen relativa de comparación directa entre ambos”. Puede que con los NNT, se pierda esa perspectiva, no obstante, el epidemiólogo subrayó que con la información que se obtiene se pueden llegar a conseguir el resto de medidas necesarias para conocer la eficiencia de los nuevos medicamentos para EM.

Genesis

En este sentido, Ortega, quien también es miembro del equipo coordinador del Grupo de Evaluación de Novedades, EStandarización e Investigación en Selección de medicamentos de la SEFH (Genesis-SEFH), explicó cómo era el funcionamiento de este grupo de trabajo y el porqué de su importancia y utilidad.

Así, se dejó constancia de que a través de Genesis se pretende desarrollar herramientas y ofrecer información para facilitar la realización de evaluaciones de calidad; aumentar la eficiencia, la calidad, la rapidez y la independencia del proceso de selección de medicamentos en los hospitales y evaluar y selecionar adecuadamente dichos fármacos.

“Lo que se pretende es hacer informes de evaluación de medicamentos e incluir en ellos aspectos que van desde la evaluación de la eficacia y la seguridad, el coste, el beneficio-riesgo y el coste-efectividad, de modo que, posteriormente, puedan ser utilizados tanto a nivel de hospital, de comunidad autónoma o por parte de quienes evalúan los informes de posicionamiento terapéutico (IPT)”, remarcó.

A modo de conclusiones, los expertos insistieron en la importancia de evaluar la eficiencia y señalaron que la mejor forma de hacerlo es a través de análisis coste-utilidad. Cuando no es posible, hay que apostar por los análisis de coste-efectividad, utilizar varias medidas y valorar la diferencia absoluta entre efectos de los tratamientos —ej.NNT— y, por último, no se puede comparar la efectividad de tratamientos de manera informal, sino que hay que utilizar comparaciones directas o indirectas ajustadas.

Cuando no se puede hacer un análisis de coste-utilidad se debe apostar por uno de coste-efectividad

A través de Genesis se hacen informes de evaluación de medicamentos, incluyendo el beneficio-riesgo y el coste