Entrevista/ El consejero vasco recalca que la solución para la sostenibilidad no pasa por el copago farmacéutico ni la exclusión de inmigrantes

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| martes, 02 de octubre de 2012 h |

En plena antesala electoral, el consejero de Sanidad del País Vasco, Rafael Bengoa, analiza su paso por el departamento. Su apuesta por el modelo de atención a los crónicos y la mejora de la eficiencia en la gestión han sido los pilares de su mandato.

Pregunta. ¿Qué balance hace de su gestión sanitaria?

Respuesta. Hemos hecho una gestión eficaz de la crisis, conseguimos hacer la demanda de 2010, 11 y 12 con el presupuesto de 2007. Hemos conseguido mucha más productividad interna en el sistema y hemos reajustado los excesos de infraestructuras. Racionalizar el gasto permite hacer una gestión eficaz del presupuesto, pero no cambia el modelo asistencial, por eso lanzamos la estrategia de cronicidad.

P. Este discurso se ha extendido a otras comunidades. ¿Fue un detonante que allá por 2009 empezara a hablar sobre este asunto?

R. La detonación se basa no solo en controlar el contenido, sino en elevarlo a política sanitaria prioritaria, y junto con la gestión eficaz de la crisis, es la política de mi legislatura. Al ser nombrado consejero me extrañó mucho que en España no existiera el movimiento y no fue difícil crearlo porque es un relato que apela a los pacientes y a los usuarios, no a la contención del gasto, tiene su fuerza motriz, cultural, y eso es lo que necesitamos encontrar.

P. ¿Se está avanzando lo suficientemente rápido?

R. Hay que hacer varios tipos de intervenciones. Somos la primera comunidad autónoma que tiene toda la población estratificada y se ha conseguido integrar los sistemas de información con atención primaria y hospitalaria, pero lo contracultural va más despacio, como hacer que el paciente se responsabilice de su enfermedad. Aún así, hemos formado a 45 personas que están formando en cada comarca a los pacientes; hay 2.000 o 2.500 pacientes.

P. ¿Se ha logrado la implicación de los profesionales?

R. Es una organización de 30.000 personas. No es posible un cambio cultural de este calado y esperar que toda una organización acostumbrada a reaccionar de forma pasiva de repente se vuelque para hacer medicina proactiva. Ahora, a través de los proyectos de abajo a arriba, donde hay médicos y enfermeras planteándose cómo van a gestionar mejor a los pacientes, tenemos unos 1.300-1.400 médicos y enfermeras metidos en ello. El resto siguen haciendo lo de siempre, han oído hablar de la reforma de crónicos, pero no ven cómo puede seguir afectando a su trabajo, aunque es inevitable.

P. ¿Han participado en el propio diseño del modelo?

R. Sí, un cambio cultural como este no se decreta. La mayor parte de las cosas vienen de abajo. Había que dejar que los médicos y los enfermeros pudieran identificar cuál era su solución. Para ello hace falta que los que llevamos el sistema estemos cómodos con la heterogeneidad. Si hacemos estas cien experiencias de abajo a arriba hay que buscar los patrones, ver qué dibujos salen y cuáles van bien o mal.

P. El País Vasco no ha implantado la modificación del copago ¿habría sido igual sin elecciones?

R. La gente del sector me conoce y sabe por qué decido lo que decido. Todas las respuestas no están en el presupuesto farmacéutico ni en excluir de la sanidad a los inmigrantes. La solución es otra. Nos oponemos porque creemos en un modelo universal por razones clínicas, epidemiológicas y de justicia social. Siempre he ido a los Consejos Interterritoriales con una argumentación lo más apolítica posible, siendo un independiente en el gobierno.

P. Comentaba que en los Consejos Interterritoriales se hablaba mucho de contención de gasto y poco de Sanidad…

Sí. En los últimos seis meses nadie me ha preguntado por la salud de los vascos, que es el verdadero indicador, no es cuánto te has ahorrado en farmacia. A veces se pierde de vista qué es un Consejo Interterritorial. Si mi consejero de Hacienda ha ido a otra reunión y ha dicho que vamos a cumplir el déficit de esta forma y lo vamos a cumplir, ¿por qué me tiene que decir el ministerio cómo lo tengo que hacer?

P. No cree que este tipo de iniciativas introducen situaciones de inequidad entre los pacientes…

R. Sí, pero yo no he votado esa ley. Se va a notar con la inmigración, aunque se vaya a atender a todos. Cuando se decide algo hay que pensar en el efecto dominó y administrativo. Primero, no imponerlo, y segundo, pensarlo bien. Otro problema es la falta de transparencia. En el Parlamento Vasco estoy obligado a decir si cumplo o no las listas de espera, pero no conozco las de los demás. ¿Por qué me intentan sacar los colores en el ranking de ahorro farmacéutico y no me dicen que voy el primero en listas de espera?

P. Eso es política o partidismo…

R. Sí, lo que he planteado es que haya una relación con un organismo independiente que marque el impacto en la salud de las medidas. Presento mis datos de manera transparente al ministerio, pero no recibo la foto del país. En dos o tres años va a ser una exigencia en la UE, por la libre circulación de pacientes. Si no, un español va a poder saber los resultados en prótesis de cadera de un hospital de Londres, pero no de Bilbao. Esa competitividad da lugar a mejoras y, sobre todo, a una mejor concentración de efectivos. En sanidad también ha habido un ladrillo “tóxico” que nos ha llevado a un modelo muy centrado en el hospital.

P. Sobre la atención a los inmigrantes, ¿no temen algún tipo de avalancha?

R. Lo hubiéramos tenido si no se hubieran tirado para atrás algunas decisiones, creo que acertadamente. Es absolutamente irreal pensar que va a haber un efecto llamada. Las ideas que se han vertido sobre los inmigrantes son un mito. No se pueden convertir en el argumento principal para tomar decisiones.

P. En el día a día se salta lo que se publica en el BOE, se da vía libre a las comunidades autónomas para que interpreten…

R. Siempre habrá elecciones en unas comunidades o en otras. Necesitamos salirnos del marco político y fijar las reglas del juego. Es lo que se ha intentado, pero se ha hecho mal. Se está haciendo política de extranjería desde sanidad.

P. Cambiar un modelo sanitario vía decreto ley no es la forma…

R. Sería un buen mecanismo si se consensuara, si se impone no es una vía de avance. Hay un problema de actitud, de saber qué es una comunidad autónoma. La mayor parte del dinero y la capacidad de gestión está en las comunidades, y la búsqueda de soluciones, no en el ministerio. La sostenibilidad no vendrá ni por los inmigrantes ni por el copago. Hay que buscar un equilibrio, gestionando la austeridad, pero también hacer políticas de crecimiento. Mientras se hacen los recortes se deja de hacer todo lo demás, de reorganizar el sistema. Sin las reformas estructurales se repetirá la deuda de 15.000 millones de euros.

P. Reformas estructurales en sintonía con lo que reclaman las organizaciones profesionales

R. Sí. Por ejemplo, no creo que falten médicos en España, están mal repartidos. Son muy buenos profesionales en un mal modelo organizativo muy fragmentado. Hay que reorganizarlo para que los clínicos puedan hacer su trabajo. Hay que resistirse a los movimientos en los que se nos van los profesionales. Si durante cuatro años de legislatura se hacen recortes bajo el paraguas de la sostenibilidad se está diciendo a los profesionales continuamente que hay un problema, que son un problema, y al final se van a ir. Necesitamos que se queden entre nosotros y quieran trabajar en nuestra sanidad.

P. ¿Se ha logrado fomentar su autogestión, tal y como anunció que pretendía?

R. No, queda mucho aún. Quizá en el próximo Interterritorial “informal” se aborde cómo avanzar en la autonomía de los profesionales y las instituciones. Iremos hacia un modelo más empresarial. Hace falta más variabilidad, poder hacer diferencias. Tenemos que trabajar en retribuciones, el ministerio tiene una función muy importante. Si lo logran, nos va a venir muy bien a las comunidades.

“Un cambio cultural como la estrategia de crónicos no se decreta, tiene que venir de abajo”

“Hay muy buenos profesionales en un mal modelo organizativo muy fragmentado”