gaceta médica Madrid | martes, 24 de febrero de 2015 h |

En un discurso con escasas referencias a sanidad, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido en el Congreso la reforma sanitaria puesta en marcha con el Real Decreto 16/2012. En concreto, Rajoy ha destacado dos iniciativas: los cambios en el copago de medicamentos y en las condiciones para tener tarjeta sanitaria

Durante la intervención inaugural, el presidente del Ejecutivo ha realizado un repaso de los tres últimos años sin entrar en nuevas propuestas para el ámbito de la salud. Rajoy ha destacado que las reformas han permitido que “750.000 españoles con tarjeta sanitaria que antes no la tenían y que un millón de parados de larga duración ya no paguen el 40 por ciento del precio de los medicamentos”.

Entre las medidas puestas en marcha por su Gobierno, Rajoy ha defendido la aprobación de instrumentos como el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) o el Fondo de Pago a Proveedores para “ayudar” a las comunidades a cumplir con las políticas sociales que son de su competencia, informa Europa Press. De hecho, Rajoy ha recordado que en los tres últimos años el Estado ha proporcionado a las autonomías más de 122.000 millones de euros de los que más del 71 por ciento se ha destinado a financiar servicios públicos fundamentales como sanidad, educación y servicios sociales. “Nos impusimos, pues, el compromiso de proteger en aquel naufragio el Estado de bienestar, mantener las prestaciones sociales, y garantizar los pilares de los servicios básicos, como Sanidad, Educación, pensiones, prestaciones por desempleo y el resto de servicios sociales”, ha defendido Rajoy, que ha insistido en que son “inseparables” de la capacidad económica de España.

En su enfrentamiento con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno ha lanzado un ataque con las políticas de salud de la Junta de Andalucía. El presidente ha puesto como ejemplo comunidades como Galicia o Murcia, que destinan un 40 por ciento de sus presupuesto, mientras que Andalucía sólo dedica un 30 por ciento. El jefe del Ejecutivo ha criticado también el recorte de 6.100 puestos de profesionales sanitarios y el cierre de 3.200 camas.