GM Madrid | viernes, 01 de septiembre de 2017 h |

El Departamento de Sanidad de Aragón tiene en marcha distintos programas y actuaciones cuya finalidad es conseguir adecuar los tratamientos farmacológicos de todos los pacientes y facilitar la adherencia a los mismos. Uno de los más destacados, por el grupo de edad al que hace referencia, es el programa de revisión del anciano polimedicado, que en el primer semestre de 2017 ha incluido a 22.870 pacientes y, desde su inicio en el 2012, a 64.521.

Se trata de una actuación instaurada en todos los centros de salud y que llevan a cabo los médicos y enfermeras. Su finalidad es revisar el tratamiento de estas personas que toman más de cinco medicamentos al día para comprobar su adherencia, su seguridad en la combinación y, si es posible, mejorar las pautas y eliminar alguno. En un seis por ciento de los casos vistos en estos seis primeros meses se retiró alguno de sus medicamentos y en un cuatro por ciento se realizó alguna intervención para mejorar la adherencia.

Del mismo modo, entre enero y junio se han realizado otras actuaciones específicas como la revisión de la combinación de tratamientos que administrados conjuntamente pueden causar algún problema, de modo que se han retirado estas combinaciones en 3.000 pacientes.

Aproximadamente la mitad de los aragoneses tiene prescrito al menos un medicamento y esta cifra aumenta en pacientes mayores. A partir de los 75 años el 93 por ciento de los pacientes toma al menos un medicamento y el 60 por ciento de ellos (80.522 aragoneses) se considera que está polimedicado, es decir, toma más de cinco medicamentos al día.

Esto se debe a la existencia de varias enfermedades vistas en ocasiones por distintos especialistas médicos, lo que provoca que se vayan sumando medicamentos y hace necesaria una valoración desde un único punto de vista. De esta forma se hace balance del beneficio que aportan y de los riesgos que puede suponer la administración conjunta de todos ellos, para determinar su correcta continuidad.

Existen distintas iniciativas a nivel nacional para revisar y retirar aquellos medicamentos en los que el beneficio para el paciente es menos claro. A esto se suma que a esta edad se tienen unas condiciones fisiológicas distintas a la población joven que hacen más probable la aparición de reacciones adversas o interacciones entre los distintos fármacos.