G.F.ESTRADÉ

Madrid

| viernes, 22 de junio de 2018 h |

Se estima que, en la actualidad, existen 70 millones de personas infectadas por el virus de la hepatitis C (VHC), de las cuales tres millones habrían recibido tratamiento hasta ahora. No solo eso, sino que además disponemos de las herramientas necesarias para su curación, con medicamentos pangenotípicos que logran su objetivo entre un 95 y un 97 por ciento de las veces. Este fue el mensaje esperanzador lanzado durante la jornada Countdown VHC: hacia la eliminación de la Hepatitis C en España, organizada por la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (Aehve) junto con la Fundación Española para el Estudio del Hígado (FEEH) en colaboración con Abbvie, Gliead y MSD,

Como recordó María Neira, directora General del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, “la meta es la eliminación en 2030, para lo que es necesario demostrar que la inversión en salud pública es rentable desde el punto de vista económico“.Los pacientes son aquí los principales protagonistas. En este sentido, Milan Mishkovikj, vicepresidente de la European Liver Patients Association (ELPA), defendió la necesidad de garantizar que cada persona afectada tenga acceso al tratamiento. “Los pacientes no estaremos satisfechos hasta que no eliminemos la hepatitis en la última persona afectada”.

El cribado es coste-efectivo

El impulsor del Plan Estratégico para la Eliminación de la Hepatitis C (Peahc) y ex ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, lo calificó como “uno de los grandes éxitos de la sanidad española” e insistió en que “cuando se decide transformar un problema en oportunidad se pueden lograr que las cosas cambien, dotando de recursos a los profesionales que saben hacerlo”.

Una vez más, el cribado se erigió como una de las herramientas fundamentales y prioritarias para alcanzar el objetivo de la eliminación. José Luis Calleja, jefe de Sección de Hepatología del Hospital Universitario Puerta de Hierro Madrid, evidenció la coste-efectividad de los programas de cribado, que en sus propias palabras “deben ser eficientes e inteligentes”. A pesar de que debemos empezar este screening en aquellos colectivos de especial riesgo, “cualquier persona debería tener hecha una serología una vez en la vida, con un registro documentado” puntualizó.

Precisamente, es en esta población de alta prevalencia en la que resulta primordial desarrollar estrategias de microeliminación. Para ilustrar esta posibilidad, Javier Crespo,jefe de Servicio de Digestivo del Hospita Marqués de Valdecilla, explicó el éxito del proyecto pionero en la eliminación del VHC en el centro penitenciario de El Dueso, con unos porcentajes de curación similares a los de la población general. “La clave es el tratamiento a la carta para lo que los profesionales y la administración debemos ser dúctiles”. Finalmente, la administración presentó las estrategias que se están llevando a cabo en cada CC.AA. Juan Martínez, director general de Salud Pública, Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid, explicó el sistema de alertas que se implantará en Atención Primaria para 2019, ante condiciones clínicas indicadoras de VHC.