C.M.López Madrid | viernes, 04 de enero de 2019 h |

Tras un año intenso de comparecencias sobre genómica, la Cámara Alta albergará la próxima semana el primer encuentro de trabajo para analizar y trazar el borrador de recomendaciones que podría servir de ayuda para la futura estrategia de Medicina de Precisión.

Antes del parón navideño, los grupos llegaron a un acuerdo para que José Martínez Olmos, portavoz de Sanidad del PSOE en el Senado, y su homólogo popular, Antonio Alarcó, fueran los encargados de elaborar el primer borrador de conclusiones que debatirán el 15 y el 22 de enero los diferentes grupos de la Cámara Alta.

Entre esas recomendaciones, la financiación finalista parece que es una idea compartida por expertos y senadores. La mayoría de los ponentes que han ido pasando meses atrás por el estrado han coincidido en que la futura estrategia nacional debe contemplar una partida presupuestaria específica.

Entre otras recomendaciones está también el reconocimiento de algunas especialidades como la genética y la incorporación en las plantillas de nuevos perfiles profesionales como los bioinformáticos.

De momento, los senadores estructurarán su propuesta, y como apuntó Martínez Olmos en esta publicación se espera que se alcance el consenso.

Por otra parte, a pesar de que los trabajos de la Ponencia de Estudio finalizaron hace unas semanas, asociaciones como Asebio presentaron a la Comisión de Sanidad una participación escrita. Teniendo en cuenta los beneficios, así como los desafíos derivados de este área de la medicina, desde la patronal se recomienda de nuevo como accioón estratégica dotar dicho plan de un presupuesto específico. Asimismo, proponen desarrollar un marco legal nacional para diseñar una regulación armonizada y que facilite el acceso a la Medicina de Precisión en todo el territorio nacional y garantizar la equidad y facilitar el acceso a los pacientes a medicamentos innovadores.

Por otro lado, Asebio cree importante poner a nuestro país entre las naciones que tienen la capacidad de desarrollar y aplicar medicina de precisión y, por lo tanto, exportar conocimiento y tecnología; con el objetivo de fomentar un modelo económico a largo plazo, capaz de integrar y desarrollar el tejido industrial necesario para mantener la incorporación de la medicina de precisión a la salud en gran escala. Para ello proponen crear un marco de gobernanza y funcionamiento que involucre a los diferentes agentes del sistema en torno a un modelo de colaboración, coordinación e integración y facilitar la información y formación a los pacientes e incorporarlos en la creación de la Estrategia.

En definitiva, sociedades científicas, especialistas en ética, derecho, bioinformática, pacientes e industria, entre otros especialistas han ido pasando por la Cámara Alta y han ido dibujando el nuevo contexto que deberá albergar a la medicina de precisión. El acento, a lo largo de estos meses, ha estado puesto en las inequidades en el acceso a las pruebas diagnósticas que actualmente existen; la incorporación de la tecnología de manera homogénea; o la protección de datos y su adaptación legislativa.