LUIS CAVANNA Valencia | jueves, 05 de diciembre de 2019 h |

José Luis Poveda (Servicio de Farmacia del Hospital La Fé de Valencia) y Carlos Camps (Servicio de Oncología Médica del Hospital General Universitario de Valencia) moderaron una mesa que revisó modelos de innovación en oncología. Poveda afirma que investigar disminuyendo la inversión “es como parar el reloj para ahorrar tiempo”.

La investigación en cifras

Citando el informe de ASEICA, destaca el crecimiento del 58% de las publicaciones en oncología en los últimos años, pero desacelerando desde 2014. Asegura Poveda que “hay espacio para mejorar”. Para Camps, los modelos actuales de investigación están obsoletos, se tarda mucho en poner en marcha proyectos y sus resultados, y se hacen preguntas en los estudios muchas veces inútiles, que es preciso reformular. Camps asegura que los nuevos modelos son el presente y la apuesta de futuro.

¿Qué es innovar?

Eva Ciruelos (Servicio de Oncología Médica del Hospital 12 de Octubre de Madrid) destaca la variabilidad molecular del cáncer de pulmón y cáncer de mama y el papel de la Medicina de Precisión (MP), pero asegura que la innovación es también es hacer cirugías conservadoras de mama, además de la inmunoterapia o las células CART”. En cáncer de pulmón hay múltiples opciones de tratamiento con distintos subtipos. Cada subtipo tiene características mutacionales determinadas, y la investigación se realiza ya en la búsqueda de los marcadores de mutación. También es preciso investigar qué pacientes se benefician más de los tratamientos con MP, ahora uno de cada tres pacientes evita ser medicado con tratamientos que no se ajustan a sus necesidades. Innovar también es evitar dar quimioterapia cuando no aporta nada, concluye. La escasa producción de patentes es una realidad en España, recuerda la oncóloga. Sin inversión no se puede ni retener el talento ni hacer que regresen a España. A pesar de todo y parafraseando a Churchill, concluye Ciruelos: “No es el fin, ni siquiera el principio del fin; estamos en el final del principio”.

Deborah Burks, investigadora del Centro de Investigación Príncipe Felipe de Valencia, repasa modelos colaborativos de éxito. Habla Burks de unidades mixtas, ya que “el Hospital general lógicamente no tienen toda la tecnología ni todas las plataformas que se tienen en un centro de investigación”, desde un animalario hasta técnicas de inmunoterapia. Burks destaca el trabajo con el Servicio de Oncología que lidera Carlos Camps.

Modelos público-privados

Para Rafael López (Servicio de oncología Médica del CHUS en Santiago de C.) es necesario abrir nuevas vías de investigación, y la más sencilla ahora es la colaboración público-privada con un enfoque de sinergias entre compañías y el sistema sanitario. Reino Unido lidera las colaboraciones público-privadas, afirma el especialista, y muestra una diapositiva con casi 6.000 millones de euros de Reino Unido en la que España figura con alrededor de 200 millones. El ministro de Industria en funciones afirmó que las colaboraciones público-privadas son la clave, destaca López. ¿Cómo hacerlo? En Galicia se ha creado un ecosistema que permite acudir a fondos europeos.

Se han canalizado fondos de esta forma para mejorar los servicios públicos, reformas en hospitales y en centros de investigación. López destaca una iniciativa con Roche co-financiada por la Agencia Gallega de Innovación, el apoyo de Oncomet y FIDIS, creando la unión conjunta de Roche y CHUS en Oncología de Precisión, que se prolongará hasta 2021. Estas iniciativas atraen líneas de investigación a Galicia e incentivan la transferencia de resultados de investigación al mercado, asegura López. La unión con Roche, ha generado 13 puestos, 2 patentes y 15 colaboraciones externas, lo que impulsa el trabajo en red. El enfoque del sector público a resolver necesidades reales no cubiertas y compartir riesgos y beneficios son aportaciones de estas colaboraciones, apunta el especialista. Entre las ventajas: empleo, nuevas competencias y visibilidad de la investigación. En definitiva, hay que correr “sin importar si eres el león o la gacela”, concluye.

En el debate posterior Poveda lanzó una pregunta retórica a los ponentes: ¿Qué les sugiere que Francia destine con fondos públicos más de 100 millones de euros a ensayos de investigación en oncología y España 270.000 euros? La respuesta podría dar lugar a otra crónica. Camps concluye que las compañías farmacéuticas no pueden ser la única fuente de financiación, aunque eso no resta valor ni relevancia a los proyectos que se emprenden con las colaboraciones público-privadas, y asegura que están dando buenos resultados.