Esther Martín del Campo Madrid | viernes, 14 de junio de 2019 h |

Las mujeres de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) están más que decididas a superar lo que consideran un doble techo de cristal. Iria Miguéns, coordinadora de su grupo de trabajo MUEjeres, explica a GM que la limitación es doble. Por un lado, la falta de equidad con sus compañeros, que se plasma de manera clara en el acceso a los puestos de liderazgo; por otro, la ausencia de una especialidad reconocida que les permita hablar de urgencióloga a cardióloga, por ejemplo.

Como en su día a día están más que acostumbradas a resolver de manera decidida situaciones complejas, no han tardado en buscar la manera de mejorar la suya propia. A finales del año pasado, siguiendo la línea de la sociedad científica americana, que cuenta con una iniciativa para dar visibilidad al papel de la mujer en la profesión, decidieron crear este grupo que ha puesto en marcha un estudio para cuantificar el peso del género femenino en estos equipos.

A través de las redes sociales se promovió una encuesta a la que han respondido más de 900 profesionales, el 91 por ciento mujeres. Las comunidades más activas en esta convocatoria han sido Madrid, Galicia y Extremadura. Iria Miguéns pone el acento en que solo un 0,8 por ciento de las mujeres que han participado tenía cargo directivo, y un seis por ciento un puesto de jefatura de servicio. Mientras, en el análisis de las respuestas masculinas, se observa ya una mayor presencia de profesionales con cargos de responsabilidad, un 1,2 por ciento en puestos de gerencia y un 10,4 por ciento en jefaturas de servicio, por ejemplo.

Un 84 por ciento de los hombres considera que no existen desigualdades de género en su puesto, frente a un 35 por ciento de mujeres que sí lo ven. Otro dato llamativo es que un 63 de las mujeres identifican problemas con la maternidad o paternidad en su puesto de trabajo. Este porcentaje se reduce a un 35 por ciento en las respuestas masculinas.

Son datos que permiten a las impulsoras de este grupo de trabajo trazar unas líneas de actuación que detalla Miguéns. La idea fundamental es el trabajo en términos de igualdad y desde urgencias, lo que aporta un enfoque plural.

En la misma línea, trabajarán en las líneas de actuación que recoge el documento, con iniciativas como la creación de comités de igualdad en los diferentes servicios , así como en estructuras a nivel hospitalario. Entre otras iniciativas, confía en que definirán medidas para resolver los problemas con las bajas, especialmente por maternidad, así como propuestas para “optimizar” desde el punto de vista personal la flexibilidad que exige su trabajo.

Otro de los puntos clave es la atención específica a la patología de la mujer, al igual que el abordaje de la violencia de género, que la coordinadora entiende que tendrán que abordar con el peso y delicadeza que requiere este problema.