E.M.C. Madrid | viernes, 21 de septiembre de 2018 h |

Eficiencia, accesibilidad, capacidad resolutiva y compromiso con la seguridad del paciente y la calidad. A día de hoy, estos cinco rasgos definen, según las conclusiones del ‘Estudio RESA 2018. Indicadores de resultados en salud en la sanidad privada’, la actividad de este sector en nuestro país.

La Fundación Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) ha presentado esta semana los resultados de la séptima edición de este trabajo, que tiene como punto de partida una filosofía expuesta por su secretario general, Adolfo Fernández-Valmayor, que parte de la base de que “aquello que no se mide y no se compara difícilmente puede mejorar”.

Eso es precisamente lo que han impulsado, de la mano de Antares Consulting, analizando un total de 63 indicadores de 325 centros sanitarios privados de todas las comunidades autónomas, un logro conseguido por primera vez desde la creación de estos informes, junto a los resultados de 186 centros de reproducción asistida.

Otra de las novedades de este año es que se han incorporado indicadores del proyecto internacional EIQI, lo que permitirá en un futuro establecer comparaciones con centros públicos y privados de países como Austria, Alemania y Suiza . También se ha analizado por primera vez el peso de los mayores de 65 años en la atención sanitaria privada, con algunas sorpresas, en opinión de los portavoces del instituto. No en vano, el 35,4 por ciento de altas en sanidad privada y el 44 por ciento de estancias totales se registran en este colectivo, cuando la idea previa es que el acceso a la sanidad privada estaba más extendido en una población más joven.

Desmontando tópicos

El director general de IDIS, Manuel Vilches, repasó los datos más significativos del estudio en un acto que contó con la presencia del consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, y remarcó que, una vez más, los resultados muestran que la eficiencia del sector privado “no es un tópico”. En este sentido, apuntó que los días de estancia media de ingreso son 3,49 y las horas de estancia antes de una cirugía son ocho. Además, el 58,3 por ciento de las intervenciones son de carácter ambulatorio. Como ejemplo, Vilches destacó que hasta un 95,7 por ciento de las cirugías biliares se realizan por laparoscopia.

La accesibilidad es otro de sus puntos fuertes. 29 días de espera media en intervenciones quirúrgicas, nueve para pruebas complementarias y tres para recibir resultados. Otro ejemplo es un tiempo medio de asistencia en urgencias de 23 minutos.

IDIS destaca la rapidez con la que se inicia el tratamiento en patologías graves, poco más de 10 días desde el diagnóstico en cáncer de pulmón, 13 en cáncer de mama y 14 en cáncer de colon.

El director general de la Fundación también repasó indicadores que muestran el compromiso con la seguridad y con la calidad de estos centros. Un 93 por ciento de las intervenciones se llevan a cabo con check-list quirúrgico y el protocolo de manos está implantado en la totalidad de los mismos. Asimismo, el 87 por ciento de los centros disponen de políticas de notificación de efectos adversos.

Los parámetros de calidad se plasman en datos como un 87,1 por ciento de cirugías de cadera 48 horas después del ingreso, un 87,4 por ciento de supervivencia al alta en ictus y un 97,5 por ciento de supervivencia 48 horas después de un ingreso por síndrome coronario agudo.

Para finalizar, las conclusiones del estudio hacen hincapié en la capacidad resolutiva de los centros sanitarios privados. Apenas un 3,4 por ciento de los pacientes que reciben el alta hospitalaria vuelven a urgencias tras 72 horas, recordó Vilches. Porcentajes en línea con el 4,5 por ciento de reingreso en hospitalización tras 30 días o el 0,8 de reingreso por causas quirúrgicas tras una semana fuera del hospital.


Tiempos de espera
La espera media para intervenciones quirúrgicas en estos centros es de 29 días, según este informe



Mayores
El 35,4 por ciento de altas y un 44 por ciento de las estancias hospitalarias corresponden a pacientes mayores de 65 años