C.M.L. | miércoles, 11 de julio de 2018 h |

La Medicina de Precisión, vinculada a los avances en la medicina genética y al desciframiento del genoma humano, supone un importante cambio en el paradigma clínico para el abordaje de numerosas enfermedades. Así lo ha puesto de manifiesto el portavoz del PSOE en el Senado, José Martínez Olmos, durante el Seminario ‘Medicina Personalizada de Precisión para profesionales de la comunicación’, organizado por la Fundación Instituto Roche.

En este sentido, el senador ha destacado que “las nuevas posibilidades de diagnóstico precoz, tratamiento eficaz y (en algunos casos) posible curación de enfermedades graves, abren una expectativa inédita para la salud de millones de pacientes”. De ahí la importancia de la puesta en marcha de la Ponencia de Estudio sobre Genómica. “Los retos son enormes porque la velocidad de los cambios en el conocimiento y el abordaje clínico de las enfermedades que se pueden beneficiar de los nuevos métodos diagnósticos y nuevos tratamientos requieren una actitud proactiva del sistema sanitario para asegurar tres objetivos esenciales: por una parte, decisiones basadas en evidencia científica; en segundo lugar, garantizar la equidad en el acceso a esos avances con evidencia científica y, en tercer lugar, conseguir la sostenibilidad del propio sistema sanitario”.

A su juicio, la revolución científica que supone el ámbito de la genómica y la genética merece una política de Estado porque tiene unas dimensiones no conocidas. “Por eso, nos planteamos en el Senado podría ser un sitio para hacer una reflexión”.

De momento, esta Ponencia ha pasado el ecuador y está previsto que finalice el último trimestre de 2018. Tras esto, los diferentes grupos políticos establecerán sus recomendaciones. Martínez Olmos ha adelantado que la intención es trabajar conjuntamente con el Ministerio de Sanidad para escribir el texto que acoja la estrategia nacional.

Por otra parte, durante la sesión, Federico Plaza, vicepresidente del Instituto Roche, ha recordado que desde sus inicios, la Fundación ha mostrado su compromiso con la implantación de la Medicina Personalizada de Precisión, y por ello, desarrolla una intensa actividad, generando consensos y recomendaciones orientadas a incorporar de forma racional y eficiente de la MPP en la práctica habitual.

La parte más científica de la sesión ha corrido a cargo de Lluis Montoliu, investigador del Centro Nacional de Biotecnología -dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)- y del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Raras (CIBERER-ISCIII) y Ramón Colomer, jefe del servicio de Oncología Médica del Hospital La Princesa de Madrid y director de la Cátedra de Medicina Personalizada de Precisión de la Universidad Autónoma de Madrid. Montoliu ha explicado todo el proceso de la secuenciación genómica de cada persona. Un modo de anticipar la respuesta ante determinados tratamientos en función de las variaciones genéticas. Así, el papel de los CRISPR y la posibilidad de editar los genes, forman parte del día a día de las investigaciones, y por tanto, ahora la investigación está poniendo el foco en su aplicabilidad en la práctica clínica. Como ha destacado Montoliu la genómica y el resto de desarrollos ómicos están permitiendo precisar mucho más el estado metabólico/fisiológico de una persona para plantear el tratamiento más adecuado.

Por su parte, Colomer ha analizado cómo ha cambiado el escenario de la oncología en los últimos años. De los tratamientos estándar hasta la inmunoterapia. En la actualidad, “los tratamientos estándar no se dirigen ya tanto al órgano en el que se ha desarrollado el tumor, sino a las alteraciones moleculares concretas que lo han ocasionado, independientemente del órgano afectado”.

Tanto las terapias dirigidas a dianas moleculares como la inmunoterapia que trata de reforzar el papel del sistema inmune del paciente contra el tumor, “son un buen ejemplo de cómo hemos evolucionado hacia una Oncología de precisión, que conforma un tratamiento más dirigido”, ha explicado este especialista. “Nos queda aún trabajo por hacer, esta nueva Oncología no es perfecta, pero es una aventura apasionante en la que no podemos tener solo en cuenta el tumor, sino al paciente en su conjunto”, ha precisado.

Con todo, el oncólogo ha puesto de manifiesto la evolución del pipeline en este campo. Las combinaciones son ahora el foco de todas las investigaciones en un escenario que no ha hecho más que crecer.