M.P. Madrid | jueves, 11 de octubre de 2018 h |

El próximo 19 de octubre se celebra el Día Mundial del Cáncer de Mama, el tumor más frecuente en la mujer del que se diagnostican 27.000 nuevos casos cada año en España. La aparición de tratamientos innovadores ha contribuido a reducir la mortalidad, ampliar las curaciones y mejorar la calidad de vida de las pacientes, buena parte de ellos de la mano de Roche.

Núria Soler, directora de Onco-Hematología de Roche Farma España, explica a GM el compromiso de esta compañía con las pacientes afectadas. “Llevamos décadas liderando la investigación en cáncer de mama y seguimos comprometidos con la búsqueda de nuevas formas de abordar la enfermedad que permitan aumentar la supervivencia y acercarnos a la curación”, asegura.

La portavoz señala que la compañía ha desarrollado varias opciones que constituyen verdaderos hitos en el manejo del subtipo tumoral HER2 positivo, que es el 20 por ciento de todos los casos. “Trastuzumab (Herceptin) marcó un antes y un después en el abordaje de la enfermedad. Supuso hace más de 15 años poder poner en manos de pacientes y profesionales la primera terapia dirigida capaz de aumentar sus posibilidades de supervivencia de forma muy significativa”, asegura. En sus palabras, este avance fue el principio de una revolución que hizo que estas pacientes hayan pasado de ser las de peor evolución a las de mejor pronóstico.

En definitiva, “transformó la forma de dirigirse a la célula tumoral. Con su introducción empezó a hacerse realidad el concepto de medicina personalizada de precisión”, matiza. No en vano, subraya que fue el primer fármaco dirigido a un tumor sólido de la historia y precisaba, además, determinar el biomarcador HER2 para identificar aquellas pacientes que iban a responder y evitar con ello sobretratamientos innecesarios.

En este tiempo, la compañía ha seguido investigando en cáncer de mama HER2+ y se han aprobado nuevas indicaciones para Herceptin, antes y después de la cirugía y en combinación con otros fármacos.

También fruto de esa investigación, Soler destaca que se han logrado desarrollar dos nuevos anti-HER2: pertuzumab (Perjeta) y trastuzumab emtansina (Kadcyla). “Este último fue además el primer anticuerpo conjugado que aunaba en un solo medicamento una terapia biológica y una quimioterapia muy potente. Todas estas terapias han supuesto un aumento de la supervivencia sin precedentes y una reducción del riesgo de muerte”, apunta.

Paso a paso, la responsable explica que aparte de conseguir mejorar la situación de las pacientes con la enfermedad avanzada, se han ido probando con éxito el uso de estos fármacos en fases iniciales.

En cualquier caso, hay retos pendientes: “Sabemos que en una de cada cuatro pacientes tratadas con Herceptin y quimioterapia el cáncer acaba reapareciendo y se estima que dos de cada tres casos de cáncer de mama avanzado con mutación de HER2 no corresponden a diagnósticos iniciales sino a recaídas. Cuando el cáncer de mama vuelve a aparecer y progresa a un estadio avanzado no es posible alcanzar la curación; en esos casos, el objetivo del tratamiento es prolongar al máximo la supervivencia. Por eso, es esencial que sigamos mejorando los tratamientos existentes”, subraya. Es aquí donde la compañía ha dado otro paso importante en los últimos tiempos, con la autorización en Europa de Perjeta para el tratamiento posquirúrgico del cáncer de mama incipiente HER2 positivo y alto riesgo de recaída. “Los datos han demostrado que un esquema conjunto de Perjeta, Herceptin y quimioterapia reduce un 19 por ciento las posibilidades de recaída o fallecimiento en estos subgrupos de alto riesgo”, remarca.

Además, Roche también investiga el papel de la inmunoterapia en un tumor como el de mama que hasta ahora ha mostrado poca sensibilidad a este tipo de tratamientos.

Hay algunos avances, anuncia, y además frente un tipo de tumor complejo, como es el triple negativo, cuyo manejo supone uno de los grandes retos en cáncer de mama. “Representa el 15 por ciento de todos los casos y es el más común en mujeres menores de 50 años”, apunta. La quimioterapia es el único tratamiento al no estar estimulado por las hormonas ni por los receptores HER2, aclara.

La compañía cuenta con un programa de desarrollo clínico dirigido a dar respuesta a esa demanda con atezolizumab (Tecentriq), un inmunoterápico con indicaciones ya autorizadas en cáncer de pulmón y vejiga avanzados, en combinación con quimioterapia. En el momento actual hay siete estudios en marcha fase III que evalúan la eficacia de este anti-PD-L1.

“Ya el pasado mes de julio se anunció que se habían obtenido resultados positivoss del estudio IMpassion 130, primer ensayo fase III con inmunoterapia en lograr datos positivos en cáncer de mama triple negativo. Sus resultados demostraron que la combinación Tecentriq más quimioterapia, como tratamiento de primera línea, reduce significativamente el riesgo de progresión de la enfermedad o muerte en mujeres PD-L1 positivas con metástasis o cáncer de mama triple negativo localmente avanzado y no candidato a cirugía”, asegura.

Todos los detalles se darán a conocer próximamente en el congreso anual de la Sociedad Europea de Medicina Oncológica (ESMO). “Una noticia alentadora que nos anima a seguir avanzando frente a este tumor”, añade.

Roche lleva medio siglo investigando medicamentos en oncología. “El desarrollo de rituximab (MabThera), bevacizumab (Avastin) y Herceptin nos ha permitido convertirnos en referentes en el ámbito de la onco-hematología, y de manera muy especial en el cáncer de mama. El desarrollo de Herceptin para los tumores HER2 positivo fue el primero de varios puntos y aparte en el tratamiento de este subtipo tumoral. Luego llegarían Perjeta y Kadcyla. Son el resultado de un esfuerzo diario por dar respuesta a necesidades médicas no cubiertas”, puntualiza.

A día de hoy, la oncología representa el 40 por ciento de los potenciales nuevos medicamentos. De los 100 millones que la compañía destina a I+D+i en España, que es el 20 por ciento de su facturación, el 75 por ciento se invierte en oncología. Prueba de que la lucha contra el cáncer siempre ha sido una prioridad para ellos, concluye.


Estadíos avanzados
“Es esencial mejorar los tratamientos existentes para alargar la supervivencia en cáncer metastásico”



Inmunoterapia
“Los avances con el inmunoterápico Tecentriq más quimioterapia se darán con detalle en ESMO”