GM Madrid | miércoles, 31 de enero de 2018 h |

En los últimos años se han producido numerosos avances en la detección y tratamiento del cáncer, provocado a su vez por una mayor incidencia de la enfermedad. Estas mejoras se traducen en una reducción significativa de la mortalidad del paciente a causa del tumor, pero enfrenta a los profesionales al reto de prevenir y diagnosticar posibles complicaciones derivadas de los tratamientos onco-hematológicos. El Hospital Universitario de Torrejón cuenta con una Unidad de Cardio-Oncología, formada por un equipo multidisciplinar con el objetivo de mejorar la salud cardiovascular de los pacientes que sufren un cáncer.

Las enfermedades cardiacas son la principal causa de muerte, junto con el desarrollo de un segundo tumor, de los pacientes que sobreviven a un cáncer. Por ello, los equipos de Oncología y Cardiología, en colaboración con el Servicio de Hematología, trabajan de manera multidisciplinar para minimizar la toxicidad cardiovascular. “Se viene comprobando, que los tratamientos a los que se someten los pacientes con enfermedad oncológica llegan a triplicar las probabilidades de sufrir eventos cardiovasculares en el medio y largo plazo. Por ello, resulta importante la existencia de unidades que faciliten la comunicación entre oncólogos y cardiólogos para someter a control a estos pacientes y mejorar la calidad de vida tras sobrevivir a un tumor” señala Parham Khosravi, jefe del Servicio de Oncología Médica del centro.

La cardiotoxicidad puede prevenirse a través de pautas a seguir por parte de los pacientes oncológicos, estilos de vida cardiosaludables, que incluyen ejercicio físico y una dieta equilibrada, control estricto de los Riesgos Cardiovasculares, o el uso de agentes cardioprotectores en pacientes con cardiopatía previa o hipertensión, entre otros. “La enfermedad cardiovascular más frecuente en personas que han tenido un tratamiento antitumoral es la Hipertensión arterial, además de la Insuficiencia Cardiaca, las arritmias, las bradiarritmias, la cardiopatía isquémica o las valvulopatías, entre otras. Es importante que se individualicen los casos y se valore el riesgo de la enfermedad cardiológica frente al de recidiva del cáncer antes de variar o suprimir cualquier tratamiento oncológico. Por ello, es de gran importancia la creación de Unidades Cardio-Oncológicas para buscar el mejor tratamiento para los pacientes” señala Eduardo Alegría, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Torrejón.

El hospital madrileño cuenta con un Centro de Oncología Radioterápica, equipada con la tecnología más avanzada. Además, ofrece diagnóstico de cáncer de mama en el mismo día de la consulta, y tatuaje del complejo areola-pezón en 3D. Asimismo, cuentan con voluntarios de la AECC que ofrecen diversos talleres: pintura, maquillaje, colocación de pañuelos, acogida del paciente oncológico, etc… que tratan de mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer.