Juan Pablo Ramírez Madrid | viernes, 20 de octubre de 2017 h |

La tendencia hacia la humanización comienza a ser una realidad en los servicios de salud de las comunidades autónomas. La farmacia hospitalaria también quiere incorporarse a este proceso y ya se han puesto diferentes iniciativas en marcha en todo el país. Ana Álvarez, del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario Ramón y Cajal, explica la transformación en la que trabaja este centro hospitalario para humanizar la asistencia.

Pregunta. ¿Qué puede aportar el farmacéutico de hospital a la humanización de la asistencia sanitaria?

Respuesta. El farmacéutico puede aportar en la mejora de la experiencia del paciente en todo lo que tiene que ver con la administración de su tratamiento. El proyecto que hemos llevado a cabo en el Hospital Ramón y Cajal con pacientes oncológicos se trata de mejorar, como especifica la humanización, la dignidad del paciente y todo lo que viene que ver con su tratamiento a lo largo de la enfermedad. El farmacéutico es integrante de un equipo de profesionales de diferentes servicios que están atendiendo al paciente a lo largo de todo un proceso. Nosotros somos una parte de ese proceso y podemos mejorar la parte humana del tratamiento de los pacientes.

P. ¿Qué se ha hecho ya y qué falta por hacer?

R. Falta todo por hacer. La humanización como tal está empezando. En los servicios de farmacia se ha hecho poco. Para el congreso nos ha costado encontrar experiencias en los que esté implicada la farmacia. En cuanto a los sistemas sanitarios está siendo desigual.

P. ¿Qué comunidades están más implicadas?

R. Por ejemplo Galicia tiene un modelo de innovación en el Sergas que incluye incorporar pacientes en el diseño de los procesos. Nosotros lo hemos hecho también en el servicio de Farmacia de Hospital Ramón y Cajal. La Comunidad de Madrid y Castilla La Mancha han sido pioneras en establecer planes de humanización. Es importante. La comunidad genera el plan y a partir de ahí todos nos podemos poner a trabajar en las líneas estratégicas. En la sesión plenaria, Rodrigo Gutiérrez, director general de Calidad y Humanización de la Asistencia Sanitaria de Castilla-La Mancha, ha destacado que es importante aprovechar la innovación que viene de abajo arriba. El sistema sanitario tiene que lanzar la idea de que esto es de todos, pero es muy importante lo que puede aportar desde abajo hacia arriba.

P. Ha hablado de reorganizar el servicio de farmacia con el paciente, ¿qué se puede hacer aquí?

R. Es un proyecto que hemos hecho dentro del Servicio de Farmacia del Ramón y Cajal que está dentro de un contexto de cambio de organización interna, de cómo los farmacéuticos estábamos trabajando hasta ahora y cómo queremos trabajar. Se basa fundamentalmente en pasar de un modelo centrado en el medicamento a otro centrado en el paciente. Para hacer esto, nos paramos a pensar si sabíamos hacerlo. Supimos que existe una tendencia en el diseño de incorporar a los usuarios. Hemos realizado unos talleres para incorporar y escuchar al paciente para que nos aporte ideas, problemas y posible soluciones para diseñar nuestro servicio mejor. Estos talleres se han realizado con profesionales y con pacientes. De ellos han surgido problemas y retos. De ahí, hemos sabido extraer las más importantes y las oportunidades de mejora. Todo está enfocado a mejorar la experiencia del paciente en todo el proceso de la enfermedad y en cualquier ámbito en el que se encuentre. Nosotros hemos hecho el proyecto con pacientes oncológicos.

P ¿Y qué os han trasladado los pacientes?

R. El recorrido del paciente oncológico es muy complejo, acaban exhaustos. Hay que tener en cuenta que están enfermos y no es un paciente enfermo. Pasan mucho tiempo en la sala de espera y quieren poder hacer otras cosas en ese tiempo. Llegan a comprender que tienen que esperar pero les gustaría en se periodo una opción que les ayude a descontextualizar la enfermedad. Ellos ya de por sí están estresados por la enfermedad y toda esa espera les estresa todavía más. Les genera mucha ansiedad. Esta metodología lo que hace es ponerse en la piel del paciente. Una parte muy importante de esta metodología es que cuando hicimos el taller con profesionales todos miramos por el bien del paciente.

P. Cómo responden los gestores a este tipo de iniciativas?

R. En nuestro caso, la verdad es que les ha encantado el proyecto y lo apoyan completamente. Están dispuestos a que estas oportunidades que han surgidos las podamos llevar a cabo.

P. ¿Cómo han respondido los pacientes a esta iniciativa?

R. Los pacientes que participaron en el taller lo hicieron con un gran entusiamo. Estaban muy agradecidos de que contáramos con ellos porque estaban siendo partícipes de toma de decisiones que iban a mejorar su enfermedad y su estado en la vida del hospital. El proyecto es muy reciente y estamos trabajando ahora.

P. ¿Qué papel pueden jugar los papeles en la investigación?

R. Es muy importante que los profesionales tengamos en cuenta los resultados que realmente importan a los pacientes. A veces no son exactamente los mismos que salen en los ensayos clínicos. Un paciente podría aportar esto: decir cuáles son los resultados que importan al paciente y tenerlo en cuenta en el ensayo clínico.

LAS FRASES

La humanización como tal está empezando. En los servicios de farmacia se ha hecho poco”

Es importante que en el caso de la humanización se pueda aportar desde abajo hacia arriba”