GM Madrid | viernes, 24 de febrero de 2017 h |

Con el objetivo de mejorar el conocimiento en tiempo real de la disponibilidad de determinados antídotos en los hospitales y facilitar los préstamos entre sus servicios de farmacia hospitalaria, la Sociedad Catalana de Farmacia Clínica y la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), con el respaldo de Boehringer Ingelheim, han firmado un acuerdo para crear la Red Nacional de Antídotos.

Los antídotos son medicamentos imprescindibles para el manejo de algunas urgencias en el ámbito hospitalario, siendo la rapidez de administración un elemento clave para la supervivencia del paciente. La disponibilidad de estos fármacos puede verse afectada por factores como la frecuencia de presentación de una intoxicación en una zona geográfica, la urgencia en la administración, las dificultades de adquisición, el coste o su periodo de validez. Por otro lado, la falta de regulación en relación a los antídotos de que debe disponer un hospital puede contribuir a la heterogeneidad en la composición de los botiquines de antídotos de los hospitales.

A partir de estas bases, la red servirá para crear una conexión entre los diferentes hospitales asociados, que facilite la comunicación entre ellos y la localización de antídotos, permitiendo compartir recursos y suplir deficiencias.

“Para la SEFH supone un avance muy importante en la gestión de antídotos y en la comunicación entre servicios de farmacia de diferentes hospitales, porque con esta firma se amplía al territorio nacional un sistema que lleva un año funcionando en Cataluña”, expone el presidente de la SEFH, Miguel Ángel Calleja.

Esta iniciativa seguirá la línea de la ya implantada Xarxa d’Antídots de Catalunya, impulsada por la SCFC e ideada, diseñada y gestionada por su Grupo de trabajo de Antídotos, de carácter multidisciplinar y que agrupa expertos en farmacia hospitalaria y toxicología clínica, tanto de adultos como de niños.

Para Timmo Andersen, director general de Boehringer Ingelheim España, es importante conseguir una mayor igualdad en el acceso a los fármacos. “Somos conscientes de las limitaciones económicas y estructurales de los hospitales, y por ello queremos potenciar las redes de antídotos, garantizando la disponibilidad a la vez que se hace un mejor uso de los recursos”, destaca.